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jueves, 26 de septiembre de 2013

El que se va sin que lo tiren, vuelve sin que lo llamen

Hace unas cuantas semanas que no me pongo a escribir, he estado con mucho lío con la academia, pero hoy vuelvo porque hace varios días que me ronda un tema en la cabeza. 
Hay una frase que dice así: "el que se va sin que lo tiren, vuelve sin que lo llamen" y hay otra que dice "si amas déjalo libre, si vuelve a ti es tuyo"...

Sobre la primera frase tengo mucho para demostrar que es bastante cierta pero las mujeres también la usamos para nuestra tranquilidad mental. 
Muchas ex parejas mías, parejas que me había dejado a mi, luego de pasado un tiempo, sobre todo después de que yo ya había superado la pérdida, volvieron a hacer su aparición en mi vida, de una forma muy magistral. Normalmente cuando un ex vuelve a tu vida, lo hace siempre con una metodología bastante currada o al menos llamativa. 

Tengo 3 casos, por un lado mi primer novio, el que me dejó y luego de 3 meses se apareció sin previo aviso en mi fiesta de graduación del instituto, me hice la dura, la interesante, durante algunas horas hasta que el chico en cuestión se dignó a hablarme y por supuesto mi "yo duro e interesante" dejo paso a mi "yo blando, mi yo aquí no pasó nada". 

El segundo caso vino de la mano de mi segundo novio, me dejó para venir para España, justamente cuando en ese momento yo estaba viviendo en Montevideo, su aparición en mi vida se dio como 2 años después que me dejara, yo ya estaba en pareja y recuerdo que me llamó una noche para decirme que quería irse a vivir conmigo a Montevideo, que había pensando mucho en nosotros (claro que mucho, le tomó 2 años) y además dentro de su discurso se le ocurrió decirme que el me amaría siempre incluso si algún día engordaba jajaja, ¡alucinante!. En este caso no di mi brazo a torcer, así que ahora cada uno por su lado, incluso él a los pocos meses de este episodio telefónico, se casó con otra chica. 

El tercer caso es de el primer novio que tuve aquí en España, este chico me dijo que nos fuéramos a vivir juntos y esa misma noche, después de ir a ver camas de dos plazas, me dijo que no era buena idea. Este fue muy persistente en su querer volver conmigo porque incluso pasado 1 y 2 años me llamaba a altas horas de la noche para decirme cuánto me echaba de menos, supongo que sería después de tomarse unas cuantas copas. 

Entonces debo decir que en muchas ocasiones esta frase se aplica, pero ojo que las mujeres también la usamos como para sentirnos mejor. Quién no le ha dicho a su amiga, quién no se ha dicho a si misma "ya se dará cuenta de lo que soy, ya vendrá arrastrándose", en fin que es como una especie de consuelo que usamos en los primeros meses de pérdida. 

Luego está la frase de que lo dejes libre porque si es tuyo volverá...bueno no sé bien que quisieron decir pero realmente pienso que incluso aunque vuelva muchas veces esa persona no es para ti, la mayoría de mis ex han vuelto a mi, hice lo que me dijeron, los dejé libres, pero al final de cuentas no eran míos cuando volvieron o mejor dicho yo ya no era de ellos. Lo mejor de que tus ex vuelvan es la satisfacción de sentir que al final el tío sí que se dio cuenta de que algo una valía y ahí viene él cual perrito faldero para que le des una segunda oportunidad y tu ya estás tan superada de dolor que ya eres tu la que dice "Si te he visto no me acuerdo".




lunes, 19 de agosto de 2013

Me reenamoré

Hace unos días me re-eanomoré. Al final, el amor del pasado que parecía olvidado resurge cuando pisas fuerte, respiras hondo, lo ves, te ve, y como si el tiempo no existiera te abre los brazos, te da lo mejor de sí y te dice "Hola" como si nada hubiera pasado.

Redescubro que nunca me aburre, que siempre tiene algo nuevo para darme y que más allá del crecimiento, de las cosas nuevas que le veo, lo esencial permanece y sigue siendo todo lo que siempre me ha gustado. 

Lo que más amo es que me es fiel, siempre está para mi cuando vuelvo a sus brazos y nunca me pide explicaciones. 

Nueva York es así, un amor para siempre, que no cansa y que me da más de lo que puedo esperar, siempre.


viernes, 2 de agosto de 2013

Guapos 0 - Feos 1

Hace unos días me pasó algo muy curioso, bueno curioso para mi, que igual es una tontería. Estaba whatssapeando con un alumno y no sé cómo surgió el tema de que le costaba ligar. Bien, hasta aquí de curioso no tiene nada, pero tengo que agregar la parte que me sorprendió: mi alumno está muy bueno,  es lo que se comenta entre mis alumnas y yo apoyo la opinión, claro, es el típico chico guapo de cara, con un "cuerpazo" y del Sur del país (lo que escribo a continuación ya es algo que se comenta entre las chicas españolas, yo no lo sabía) hombres que tienen fama de ser los más atractivos. Entonces cuando me contaba que no ligaba la "cantidad" que le gustaría, me quedé con la boca abierta porque no me lo hubiese imaginado.

En realidad, ¡ayyy como somos las personas!, nunca estamos conformes con nada, incluso pienso que parece que para ligar con ser guapo y tener un cuerpito bendecido por la gracia divina no es suficiente. Claro, cualquier ser normalito, de belleza estándar pensará: "pero si a este le cuesta ligar qué queda para mi?"...pues mi respuesta es: mucho, porque a las mujeres que no somos las mujeres de "Hombres, mujeres y viceversa", buscamos ligar con algo más que con un cuerpo y cara bonita, ojo no siempre (todo depende del momento y de lo que estemos buscando).

Yo le decía a mi alumno que el acercamiento a una mujer además de que con cara y cuerpo ya tiene mucho ganado, va por el tema de hacerla reír y no hacer las típicas preguntas estúpidas "¿vienes mucho por aquí?" "¿qué bebes?"...en fin vamos todo de manual.

Estaba leyendo el otro día que la Universidad de Stanford hizo un estudio a mujeres y hombres dónde se hacía un escaner cerebral, de ahí se concluyó que las mujeres estamos más predispuestas al humor.

Mi amiga M cuenta una anécdota muy divertida. Se le acerca un chico en la barra de un bar y le dice: "¿me invitas a una copa?", ella responde que no, entonces el chico le dice: "no te preocupes, yo te invito. Camarerooo cuando pueda dos vasitos de agua" jajaja a mi me pareció muy divertido y al igual que mi amiga le hubiese dado una oportunidad para conocerlo.

Entonces la pregunta que me planteo es: ¿qué nos hace elegir un chico y no otro?. Es verdad que un cuerpazo no lo es todo, bueno en realidad nada, ya he comentado en otra entrada que yo he tenido la oportunidad de estar con cuerpazos y realmente hombres hermosos pero a la larga eso ni siquiera los hacía más especiales en la cama ni mucho menos más especiales para tener nada.

Mi amiga E, ha salido con un chico muy atractivo pero si hay algo de lo que carecía era de labia por lo que mi amiga E tuvo que cortar, incluso sintiendo una atracción física por él irrefrenable, el hecho de que con el tío no se pudiera hablar más que de cómo está el tiempo, la agobiaba tanto que no tuvo más remedio que decirle "bye bye".

Recuerdo que hace muchos años salí con un chico que era realmente espectacular, modelo publicitario, todavía me pregunto cómo me dio bola a mi, la cuestión es que poco duró porque el día que me escribió un e-mail y vi que escribía hay sin h y hacer con s, pues mi libido disminuyo al punto de preguntarme a mi misma que es eso de la libido.

Volviendo con mi alumno, que no tiene nada que ver con estos casos, ya que creo que estamos ante el típico caso de chico guapo pero tímido, no sé que remedio existirá,  pero mujeres, si se encuentran con chicos así creo que no le vendría nada mal a ellos y a vosotras dar el primer paso porque a veces detrás de los chicos guapos se esconde un chico especial en muchas otras cosas, que sólo necesita un empujoncito para mostrar que no es sólo una cara bonita (vale, sé que esto sonó muy cliché :) )



jueves, 25 de julio de 2013

Cuanto más mejor...

Las conversaciones femeninas comienzan así:
- Hola, que tal va todo?...que tal el trabajo? (10 minutos)
- y con Fulano que tal? (30 minutos)
- y alguna vez probaste?, alguna vez hiciste? (hasta que se esconde el sol)

Es más que sabido que el sexo ocupa gran parte de nuestras conversaciones, nosotras nos contamos todo, absolutamente todo, no hay detalle que no sepamos de los novios de nuestras amigas o del último ligue. Hablamos de sexo para aprender, para comparar, para disipar dudas y sobre todo para divertirnos. 

La semana pasada estábamos una amiga y yo en un Vips, hablando de que su último ligue no tenía tanto interés en el sexo como ella, algo que me sorprendió bastante porque tengo la impresión de que los hombres tienen la idea fija. Sin embargo no todos los hombres son iguales (al final esta frase sí que la podemos aplicar ¡mujeres!). Hablando con otra amiga me comentaba que ella había terminado su relación de 5 años (evidentemente que había más motivos que este) porque el sexo con su pareja no era satisfactorio y según ella bastante escaso. Conociéndola, sabiendo lo sexual que es, le pregunté qué era para ella escaso y me dijo que apenas 2 veces por semana, a mi se me vino el alma al suelo porque con mis parejas estables después de años de estar juntos 2 veces por semana se transformó en un récord casi imposible de batir. 

Entonces mi pregunta es: ¿en qué punto las mujeres y los hombres tenemos las mismas necesidades sexuales?. Siempre he considerado que los hombres tenían más necesidades que las mujeres pero cada vez más me encuentro con casos donde las mujeres tienen más necesidades o igualan las necesidades que tienen ellos. Yo creo que más que cantidad las mujeres necesitamos calidad, aunque según mi amiga la del Vips, la cantidad es igual de importante. Bajo mi punto de vista las mujeres necesitamos tener sexo de alta gama, ya es sabido que no nos ponemos a la primera de cambio, por eso creo que más vale 1 pero de los buenos que 5 de los regulares. 

Lo que descubrí hablando con mis amigas es que los mitos sobre quién está siempre listo para... son realmente mitos y que la necesidad de tener sexo no se limita al género y para mi sorpresa hay hombres que no lo ven como algo primordial en sus vidas (sí señoras, hay hombres que hasta podrían vivir sin ello)...en fin que siempre se aprende algo nuevo.




jueves, 11 de julio de 2013

La tentación de las tartas de chocolate...

Qué bueno es tener amigas, siempre que me siento a comer, tomar algo, chatear, etc, siempre, siempre me sirven de inspiración para alguna entrada. Hoy quiero hablar de un tema que salió con una gran nueva amiga que tengo. En una comida estábamos hablando obviamente de hombres y me contaba que si bien ella tiene pareja, hay un chico que cada vez que ve, prefiere mantenerse alejada. 

Claro, el tema está en que cuando está cerca de esa persona, con sólo mirarse, sabe que la tentación de cometer un "pecado" es grande. La famosa llamada química entre las personas. Hay cierta gente en la vida que con solo mirar, rozar y ya ni te cuento tocar, te transforma. Es como si esa persona tuviera un poder de atracción tan grande sobre uno que realmente nos olvidamos de quienes somos, con quien estamos y en lo único que pensamos es en estar con esa persona, en tocarlo, besarlo, etc. 

A mi también me ha pasado, he incluso cambiado horarios y dejado de frecuentar sitios para no encontrarme con una persona que sabía que dónde me diera pie no iba a poder resistirme, esas cosas de la atracción que son inexplicables...

Allí estábamos las dos comiendo y pensando en como la tentación está a la vuelta de la esquina y que controlarse resulta tan difícil que es mejor tomarse el bus de la esquina que nos lleve en dirección contraria. Según mi amiga somos "hormonas andantes". 

Uno de mis alumnos tiene una teoría que me encanta, yo la he modificado un poco. Él plantea que estar en pareja es como estar a dieta, donde todas las demás mujeres del mundo son como tartas de chocolate.

Ahí estás tú con tu dieta, la sigues con alegría porque sabes qué es lo mejor para ti, te hace bien, te sientes mejor, te da todos los nutrientes que necesitas, pero claro un día pasas por una panadería y ¡zas!, una tarta de chocolate, eres consciente que entrar y comprar un trozo no sería lo más apropiado, estás a dieta, la tentación es grande, entonces una de dos; la pruebas y los sentimientos de culpa seguramente te persigan o decides seguir de largo esperando la hora de la cena donde una rica ensalada te está esperando. 

Oscar Wilde decía que él lograba resistirlo todo menos el deseo...y realmente es bastante complicado.